Ao no exorcist cuenta la historia de Rin Okumura. Rin es un chaval quinceañero que no deja de meterse en líos y pasa de buscar algún trabajo o estudiar para meterse en una academia decente. Al contrario que su hermano gemelo, Yukio Okumuro es tranquilo y trabajador. Los dos viven bajo el techo de un exorcista que es su padre, que también hace el trabajo de cura. Para cuando Rin se vá a una entrevista de trabajo planeada por su padre, se encuentra a unos gamberros que fueron palizados por Rin hace un día. Con intención de negociar el silencio de aquel día el jefe se burla del hermano de Rin y se crea un conflicto entre ambos. En ese momento aparecen en Rin unas llamas azules, sin explicación alguna el padre de Rin aparece y le explica a Rin que dentro del jefe habitaba un demonio de verdad. Su padre lo mata y salen corriendo. La única explicación que recibe Rin es que es el hijo de Satán.No todo lo que he escrito es el primer capítulo, creo yo que si lo escribiese todo perdería mucha emoción leerlo. A mi punto de vista Kazue Kato ha logrado jugar muy buenas cartas a la hora de crear esta historia, su dibujo fue lo que más me gusto a la hora de leerlo, las expresiones que dibuja son bien definidas y variadas entre los personajes de la historia. Lo siguiente fue la distribución de las viñetas y el uso del diálogo, quiero decir, yo normalmente cuando leo Shônen suelo tener la impresión de que todos los capítulos son cortos, pero que no ocurren rápido, o que suelen ser muy largos a pesar el mismo número de páginas. Con Ao no exorcist pude disfrutar de una lectura rápida y lenta. Con sólo 70 páginas del primer capítulo manga me dió la sensación de estar leyendo un tomo entero, pero de lo interesante que era la velocidad de lectura fué más rápida. Y de las escenas de acción... ¿qué puedo decir? son MUY shônen.
¡Un saludo!
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