
Se nota al leer, que Belén investigó la historia de Japón al escribirla. No soy un experto en guiones, pero tengo claro que la presentación de personajes es precisa y clara. Los diálogos van concorde con los personajes y no se hacen pesados. Más que en la acción, diría que la historia nos enfoca en el misterio, una historia en la cual aunque Himawari busque venganza, el epílogo nos dice misterio y respuestas.
El dibujo nos dice las influencias que ha tenido Belén de autores como Nobuhiro Watsuki y Hiroaki Samura. Hay un dibujo fuerte, que le dá mucha acción a las escenas aun dibujando con rotring. Un dibujo original sin duda, destaca mucho en los flashbacks. Belén sin duda le habrá costado desarrollar un nivel tan altamente profesional. Siendo a la vez suave y duro el estilo, y eso se puede observar en la portada.
Mis felicitaciones por la obra, a cualquiera que le gusten las historias de espadas, samurais o vengativas les gustará Himawari.

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